Si chicos, el pasado jueves jugamos a fútbol en el Planter(partido, que por cierto ganamos y en el que tuve una brillante actuación defensiva). El caso es que cuando llegué a casa, tenía la equipación empapada, y no quería arriesgarme a que se deteriorase, así que usando la Famosa Ecobola, puse la ropa en remojo y la lavé a mano. Cuando acabé de lavar la ropa se me planteó el segundo problema. . . ¿Donde tiendo la ropa? Y es que claro, no había yo tenido en cuenta, que después de lavar la ropa, hay que tenderla. . .
El caso es que, después del pánico inicial, empecé a tranquilizarme -"Bueno, que no cunda el pánico, Vicente, Respira, eres un tio inteligente, seguro que eres capaz de salir de esta, en peores situaciones te has visto"- Conseguí tender la ropa, luego os contaré como.
24 horas después, y dado que la experiencia con la ropa deportiva fue un éxito inesperado ( Ni se encogió la ropa, ni perdió el color, ni explotó nada. . .) opté por arriesgarme y enfrentarme a otro de mis miedos. . . La Lavadora.
No fue tan complicado como me pensaba, Metí la ecobola en la lavadora, puse la ropa, me santigüé y la encendí. El resultado
no pudo ser mejor, Saqué la ropa limpia, sin olores, y casi seca gracias al centrifugado.
Luego me tocó tender la ropa, y aun sin tendedero ni pinzas...
Este es el tendedero que me sacó las castañas del fuego.
Si chicos, cogí perchas de esas de plástico, y tendí la ropa debajo de la caldera, ni Macgyver lo hubiera hecho mejor. Al día siguiente tenía la ropa lista para "recolectar".
Si algún día tenéis problemas, no dudéis en consultar conmigo, si he salido de esta, me veo capaz de cualquier cosa.
PD. El lunes fui a comprar un tendedero, Ya no hará falta que vuelva a recurrir a las perchas. Una pena.
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