martes, 26 de abril de 2011

IL Salvatempo.

Tiempo atrás se estuvo hablando en este blog de las gafas de realidad aumentada. Como recordaréis fue un gran fiasco, Lo que prometía ser tecnología punta en el supermercado se convirtió en unas simples gafas truñeras. Echadle un ojo aquí si no os acordáis. Pero la semana pasada la realidad superó con creces a la ficción, bueno, miento, digamos que descubrí algo tecnológicamente avanzado, aunque no llega a la altura de lo que mi mente vislumbró tiempo atrás.

Para contaos la historia de hoy, debéis hacer conmigo un viaje con la imaginación de unos cuantos kilometros. . . Nos vamos a situar en Italia donde estuve recientemente, concretamente en un hipermercado llamado Ipercoop. Pues bien, cuando entramos, vi algo que llamó poderosamente mi atención, eran una especie de PDA's, ignoraba para que servían, ignoraba si podía coger o no una y mirarla. Así que para evitar que me llamasen la atención como pasó en una época ya pasada de mi juventud, en una conocida pizzeria de Valencia simplemente hice esta foto a traición y cogí un folleto.

Como no me atreví a coger uno para hacerle una foto en mi propia mano, os he puesto una foto que he hecho al folleto donde se puede apreciar con detalle la maquina. Apenas hay diferencia entre mi mano y esa.


Os voy a explicar brevemente el funcionamiento del aparato y tu utilidad. Para empezar, para usarlo hay que ser socio de su club, vamos, lo mismo que tener la tarjeta consum o ser del club carrefour.

Para empezar los socios tienen igual que aquí en España, una tarjetita personal e intransferible que deben pasar por un lector y que les desbloquea un aparato en concreto que usarán.

Una vez con el aparato debes leer el código de barras de cada artículo o pack de artículos que desees comprar, una vez detectado el producto, aparecerá en la pantalla, lo siguiente será pulsar la tecla "+" para añadirlo a tu "cesta", y ya podemos introducirlo en el carro dentro de una bolsa.

El Salvatempo no sólo te permite ir leyendo los productos para ahorrar tiempo en caja, también va calculando lo que llevas gastado y te lo muestra en la pantalla en cada momento para así, evitar salirte del presupuesto.

Especifican que para promociones 3X2 o similares tienes que "leer" el código de barras de los 3 productos, y sirve para todos los artículos del hiper, excepto para la zona de prensa.

Si algún producto no pudiese ser leído por algún motivo, simplemente hay que comunicarlo con posterioridad para que te lo añadan en la caja.

Si decides quitar un producto, sólo tienes que leerlo y darle a la tecla "-"

Una vez acabada la compra, tienes que dirigirte a unas cajas especiales que hay y presentar tanto la tarjeta de socio como el "Salvatempo". No se si te revisarán la compra, supongo que en principio no, pero es posible que las cajeras se reserven el derecho a comprobarlo.

No se hasta que punto en España sería factible este tipo de tecnología, ya que aquí hay gente muy tramposa que intentaría "estafar" día si día también, pero yo he de admitir que me quedé con las ganas de usarlo, y estoy seguro que mi hermana también.

martes, 19 de abril de 2011

Receta Del Gran Chef: Rosas Dulces.

Os habréis dado cuenta que últimamente no publico con tanta asiduidad como solía hacer. No es que no pasen cosas guays, es que no son tan guays como deberían. Las novatadas se están dejando de suceder y lo que empezó siendo un zoológico de pelusas se está convirtiendo en un retiro espiritual para la jet set pelusil.

Bueno, a lo que vamos, hay mucha controversia en el mundo acerca del tema de las palomitas de maíz. Los más puristas opinan que las palomitas de maíz auténticas, son aquellas que se hacen saladas, sin emplear otro ingrediente que no sea el maíz, el aceite y la sal. Pero los cocineros de "la nueva era", como somos Ferrán Adrià y yo, creemos que se puede llevar el placer de las palomitas un nivel más allá simplemente evitando anclarse en el pasado.

Para ir abriendo boca aquí tenéis un vídeo que tenéis que ver si o si.


Pero continuemos con algo de historia de mi vida.

Cuando era pequeñito y me quedaba en casa de mi yaya Julia los fines de semana, pasabamos las tardes de los sábados en la cocina.

Era para mi muy complicado soportar cine de barrio finde si finde también, así que para evitar acabar trastornado por culpa de José Parada, canalicé mi creatividad hacia el tema culinario. Las recetas que más hacíamos eran "Rollicos" (un dulce que según tengo entendido es típico de la zona de donde son mis abuelos de Cuenca, que se hace con harina, vino, azúcar y esas cosas, y que posteriormente se fríe, ) y, como llama mi abuela a las Palomitas, Rosas, concretamente Rosas Dulces.

Otro día trataré con profundidad la receta de los rollicos, pero hoy nos vamos a centrar en lo que hemos empezado hablando arriba.

Las primeras veces que hacíamos las palomitas, teníamos un serio problema, como todos sabréis, cuando calientas el azúcar estaba acaba quemándose, y lo que en principio iba a ser algo dulce, se convierte en algo que podríamos calificar como carbonizado.

Si intentabas poner a última hora el azúcar, esta no se llegaba a disolver/fundir con lo que no azucaraba las palomitas.

Sin más dilación (que ya se está dilatando mucho esto la verdad) voy a comentar la receta y el como se solucionó el problema.

Empezaremos con los ingredientes:

-Palomitas de Maíz.
-Azúcar.
-Aceite.
-Agua.
-Colorante Alimentario (Opcional)
-Y muchas cosas bonitas. . . Ah no espera, eso eran Las Supernenas.


Colocamos la sartén con una chucharadita de aceite al fuego y, aproximadamente la mitad de su fondo con palomitas. Es importante no poner maíz en exceso, ya que al explotar aumentará su volumen una barbaridad y las palomitas se acabarían quemando al no poder moverse en libertad dentro de la sartén.

Como podéis apreciar en la foto de arriba, también podremos el ingrediente/elemento secreto, que no es otro que el agua. Es importante que nada más estar la sartén al fuego, vertamos un poco de agua, ya que este agua evitará que el azúcar que echaremos con posterioridad se queme con tanta facilidad, y también hará que se disuelva y forme un almíbar que quedará adherido a las palomitas.


Cuando el maíz esté caliente y las palomitas estén apuntito de empezar a saltar (es algo que se masca en el ambiente y que notaréis, ya que se crea una sensación de ansiedad equiparable a que te esté apunto de explotar una bomba entre las manos) será el momento de cubrir de azúcar, de manera generosa, toda la mezcla de maíz y agua y moverlo hasta que exploten una o dos palomitas.

Cuando esto se produzca, será importante cubrir con una tapa que encaje a la perfección la sartén para evitar que al moverla, se nos escape el contenido.

Es importante mover continuamente la sartén sacudiendola arriba y abajo para evitar que se peguen las palomitas o que se queme en exceso el azúcar. Lo ideal es dejar 10 segundos al fuego y mover arriba y abajo durante 5 segundos, así una y otra vez hasta que la cadencia de explosiones baje ligeramente, en ese momento habremos terminado. Tendremos que andarnos con ojo, ya que siempre hay alguna palomita Trollcorn que intentará explotar cuando pensemos que ya están todas y que hará que nos asustemos.

Si seguís mis consejos y tenéis un poco de suerte, no os pasará esto:


Como se puede apreciar en la foto el socarrat que tanto gusta en la paella (por lo menos a algunas personas) también podemos tenerlo en las palomitas, aunque no es nada apetecible, y por el aspecto debe ser 100% canceroso.

Lo que veis ocurrió por que puse exceso de palomitas, y aunque intentaba que no se pegasen, moviendolas arriba y abajo, estaban tan apretadas que todos mis intentos fueron en vano.


El 10% de las palomitas iniciales acabaron convertidas en lo que habéis visto arriba, pero mereció la pena el sacrificio, ya que, el 90% restante, acabó transformándose en las Rosas Dulces Verdes/Doradas más bonitas que había visto nunca. Aquí tenéis una pequeña muestra.

martes, 12 de abril de 2011

Around The World.

Vamos, Alrededor del mundo para la gente de aquí, y no es que me vaya a dar la vuelta al mundo. El caso es que Recientemente en Blogger (que es basicamente donde está subido este truñiblog) te dan la opción de ver las estadísticas acerca de las visitas y muchos más datos de interés.

Gracias a esto, he podido comprobar que no sólo visita el blog gente de España como sería de esperar, hay gente que ha entrado a leer desde lugares tan dispares como Ecuador, EEUU, Italia, Japón . . .

Estos números de aquí abajo son las paginas vistas por países desde que llevo escribiendo. Como es lógico, el país que más visita el blog es España. Pero conocer estos datos me lleva a plantearme numerosas preguntas. ¿Como es posible que haya entrado tanta gente desde otros países? ¿Que buscaban para haber caído aquí? ¿La gente que me lee y no es Hispano parlante, estará utilizando este blog para aprender castellano?

Mostrar
España
6.924
Estados Unidos
154
Argentina
70
México
63
Italia
55
Chile
41
Colombia
33
Canadá
30
Reino Unido
15
Francia
14

Todo parece indicar que la gente que ha entrado desde fuera de España ha sido por error, ya que en esas estadísticas también se aprecia que la mayoría de gente entra a través de Google. Y cierto es que desde que hice la entrada de la Gillette las visitas también se han multiplicado de forma exponencial. Lo que en principio iba a ser publicidad para ellos, lo ha acabado siendo para mí.

Así que ya sabéis, si queréis tener un blog de éxito, tenéis que publicar entradas que hablen de marcas o cosas conocidas. Otra opción es hacer un blog divertido, bien estructurado e interesante. Pero eso es tan difícil, que vale la pena seguir un consejo que me dio una vez Groucho Marx. "Estos son mis principios. Si no le gustan, tengo otros."

jueves, 7 de abril de 2011

En la consulta del dentista.

Disculpad, pero he estado algo falto de inspiración, y no es plan ir poniendo entradas de relleno una tras otra. Aunque en Naruto lo hicieron y funci. . . bueno no, no funcionó.

Seguramente el título puede llevar a engaño, es normal, al leerlo pensaréis que he ido al dentista y me ha pasado como a mi amigo David.



Pero no he pasado por la consulta últimamente, por suerte, gozo de unos poderosos y afilados dientes.

Hoy, de lo que me gustaría hablar, es de algo que se ve de forma muy habitual en las consultas de nuestros queridos amigos los odontólogos.

Está claro que sus consultas no son una biblioteca, pero tienen un montón de revistas, la mayoría excesivamente antiguas, que deberían actualizar.

Hace años, me puse a leer una "muy interesante" y cuando vi la fecha me asusté, tenía, sin exagerar, más de 6 años. Desde aquí hago un llamamiento para que los dentistas se actualicen.

Volviendo un poco al tema, en mi afán por hacer que mis invitados se sientan como en casa, he empezado a plantearme la opción de comprar algunas revistas para que tengan algo que leer si vienen.

Seguramente a mis más cotillas visitantes (Arenita Mejillas, Massuet, Squire) les encantará tener revistas de este tipo. Siempre gusta ver los cotilleos de los famosos.


Mis amigos más Geeks seguro que se pelean por revistas como estas, las Quo las consigo con los puntos de BP.


Aish mis añoradas y caras White Dwarf, que tiempos aquellos en los que era un jovenzuelo que pintaba miniaturas de Warhammer con más pena que gloria.


Desde siempre, en mi familia la afición al mundo de las dos ruedas ha sido palpable, en casa siempre han habido más motos que coches, con lo que es normal que esa tendencia continúe ahora que vivo solo.


Que puedo decir de las revistas que he dejado para el final, son si cabe, las más interesantes. Las que seguro que gustan a un amplio abanico de visitantes, sobre todo del genero masculino.

Es probable que mi hermana hubiese preferido una Shonen Jump, o alguna revista de cocina, y mi madre, como no, una de ganchillo, pero no puede llover siempre a gusto de todos.

Por cierto, ahora que he acabado esto, me estoy dando cuenta que es una entrada de relleno. Ohhhhh Dios que he hecho. . .