miércoles, 19 de noviembre de 2014

La gata naturista. Versión 2.0

Seguro que muchos os estaréis preguntando a que se debe lo de Versión 2.0. Pues bien, hace unos meses empecé a escribir una entrada en la que se contaba que la gata estaba dejando de utilizar su zona habitual para hacer pipí  y popó. El silicio que se vende a precio de oro en las grandes superficies parece que había dejado de gustarle. . .

No se porqué, al gato de la foto se le ve super feliz. . .




El caso es que la gata flirteaba mucho con la tierra de la jardinera y alguna vez este verano, aprovechando un desliz, la he pillado en pose comprometida y con cara de "mierda me ha pillado". 



Pero lo anterior sólo es un prologo de la historia de hoy, el caso es que desde que soy La Mano del Rey la gata tiene comportamientos ciertamente extraños, comportamientos que no voy a explicar para no hacer demasiado largo esto.

El caso es que me tocó llevar a la gata al veterinario.

Contra todo pronostico, la gata accedió a entrar en el transportín y durante la consulta del veterinario se portó muy bien y se dejó manosear dando unicamente un bocadito de advertencia a la veterinaria cuando esta intentó ( creo eh, no estoy muy seguro ) meterle un dedo en el ano.

Al ver esa imagen a mi mente vinieron este vídeo.

Pero centremonos, la veterinaria me dijo que tenía que llevarle una muestra de orina de la gata para descartar que pudiese tener una infección, mi cara fue en plan: "Vale, ¿Y cómo consigo una muestra de orina de la gata? no creo que quiera mear en un botecito.

La veterinaria me dijo, eso compras lentejas, las lavas y las secas y se las pones en su caja de la arena.

Claro, después de oir esto lo primero que pensé fue: Claro, Mai seguro que se pone a mear y a cagar en las lentejas, eso es de pobres, si al menos fuese en caviar. . . 

Ayer fui a Mercadona a comprar algo que yo jamás pensé que iba a comprar,

Yo me temo que la veterinaria se echó unas risas a mi costa y que en realidad posee gran cantidad de acciones de "La Compañia Nacional de Lentejas". Como las ventas no le deben ir muy bien creo que receta a todo el mundo que compre lentejas para que sus gatos meen allí.


Compré tres kilos, y me dispuse a lavarlos . . .




No tranquilos, no soy tan retarded. Aunque habría sido divertido ver una obstrucción de lentejas tanto en lavavajillas como en lavadora sabía que para lavar las lentejas había que usar un bol con agua al más puro estilo de buscador de oro, de hecho así me sentía.



Foto que me sacó un amigo
mientras lavaba las lentejas.
durante el No Shave November
Una vez lavadas todas las lentejas las puse a secar en todas las bandejas que encontré por casa.


Esa misma noche, intenté despistar a la gata para poder sustituir su silicio por las lentejas sin que se diese cuenta. Fue una lastima no poder sacar foto del momento, pero la gata me pilló, y por como mira la gata ahora su caja de las cacas, creo que no le ha hecho mucha gracia.