jueves, 9 de agosto de 2012

Tiramisu decaffeinato

Era una calurosa noche de verano. . . 

He empezado la entrada así, pero nada tiene que ver con lo que viene a continuación, simplemente me aconsejaron que sería un buen gancho para que la gente la leyese y por si acaso, así lo he hecho.

El caso es que recientemente y dos años después de la creación del blog, mi hermana se ha hecho fan en facebook y ha empezado a leerlo. Un poco tarde la verdad, pero tampoco vamos a ponernos exigentes que este blog no es tan bueno.

Como muchos sabréis, el principal atractivo del blog es mi faceta culinaria, como habéis podido ver a lo largo de estos años, siempre suelo causar el caos en mi cocina, mi hermana  no es la única que ha sido muy critica en este aspecto, son muchas las voces que dicen que si todo es ficción, que no se puede cocinar tan mal.

El caso es que la semana pasada, después de leer la entrada de los crepes, dijo: "La próxima receta la hacemos juntos" y ayer fue la fecha elegida. 

El postre en cuestión iba a ser tiramisú, pero claro, ni a ella ni a mi nos gusta el café, así que optamos por una versión sin café, apta para todas las edades y estómagos.

Los datos de la receta como tal no los voy a dar, ya sabéis que no acostumbro , sólo diré que dejé que ella se encargase de la mayoría de cosas. Lo primero que había que hacer era el bizcocho, para ello se separaba la clara y la yema de dos huevos, como podéis ver en la foto, separó la yema de 1,95 huevos, dejando un 5% de huevo sin separar. Os preguntaréis a que se debe, pues bien, según ella, la culpa es de los huevos ecológicos que son muy blandos y que "total, por un poquito no pasa nada".


Luego, se le echa una pizquita de sal para que se monte más fácilmente y ponemos al hermano de turno a batir hasta que se monten a punto de nieve. Cuando el brazo ya no me daba más de si ( y eso que es el derecho. . . ) continuó mi hermana, pero el trabajo duro ya lo había hecho yo.

Aquí un servidor alcanzando velocidades que ni Flash.
A continuación se añadía la harina mezclada con algo de levadura con la ayuda de un colador para que quede tamizada. Pues bien, en este momento mi hermana me enseñó algo que yo desconocía. Si bien es cierto que sabía que había harina de fuerza (para hacer pan) y harina para hacer bizcochos, ignoraba que en las levaduras pasaba lo mismo. ( Ahora entiendo el motivo por el cual el bizcocho que hice hace unas semanas y que no llegué a mostrar en el blog parecía un ladrillo, aparte de harina de fuerza, había utilizado levadura para hacer pan.)

Hacer las fotos fue realmente complicado.


Bueno, el caso es que mezclamos todo, lo ponemos sobre papel de horno, y lo ponemos a calentar durante unos ocho minutos y luego lo separamos del papel.


Una vez hecho el bizcocho, había que hacer el relleno. Los pasos son más o menos los mismos pero en lugar de añadir harina, pondremos el mascarpone.

Pues bien, yo separé las claras de las yemas a la perfección y a la primera, y luego, me dejaron nuevamente montando las claras.


Mientras yo estaba dale que te pego a las claras, mi hermana añadió a las yemas azúcar, y fue batiéndolas.


Le dio al tenedor con tanta fuerza que me manchó la zona baja de la espalda con esa mezcla de huevo y azúcar, las imágenes que van a ver a continuación pueden herir la sensibilidad de los lectores, así que aconsejamos que no se vean.


Una vez tenemos bien removidas las yemas y el azúcar, hay que añadir 250 gr de mascarpone y seguir mezclando.


Voy a refrescaos la memoria, mi hermana ya la lió cuatro fotos más arriba separando las claras de las yemas, luego manchó mi espalda  con huevo, y como vais a ver en la foto que viene a continuación, también tiró por el banco algo de queso.

Llevamos en los genes lo de ensuciar.
Una vez limpio todo, llega el momento de poner la crema sobre el bizcocho. Ahora bien, en las proporciones que hicimos nosotros sobraba crema a punta pala. La muestra la podéis ver dos fotos más abajo, donde rebosa mezcla.


La idea de mi hermana era hacer una especie de brazo de gitano tiramisuero, y aunque yo intenté convencerla que era mejor idea hacer algo más tradicional y por capas, no conseguí hacerla cambiar de opinión, siendo hermana mía, me habría decepcionado si hubiese cedido.

Al enrollarlo toda la crema empezó a salirse.
Esto es lo que se llama un momento épico.
Una vez conseguimos enrollarlo evitando la salida masiva de crema por ambos lados del rollo y por el lateral, llegó el momento de pasarlo a un plato, si os fijáis en la foto de arriba la longitud del "Tiramisú" es considerable, así que hubo que cortarlo por la mitad.

Una mitad fue devorada por un servidor en menos de 24 horas. (Estoy algo malo de la garganta y eso suele darme hambre sobrehumana.) y la otra mitad fue decorada y llevada al trabajo de mi hermana, donde, a fecha de hoy, aún no se ha dado ningún caso de intoxicación.



4 comentarios:

Ainhoa García dijo...

Pues no...visto así no queda tan bien ese comienzo xD eso si el tiramisu tiene un pinta deliciosa!

Unknown dijo...

Como que era un comienzo muy flojo, pero me sabía mal quitarte la ilusión. El tiramisú se extinguió en menos de 24h.

Anónimo dijo...

Llames como lo llames no deja de ser un bizcocho con crema...se esperaba algo mas clasico...el cafe se podia sustituir y aun le falta algo de ron por ejemplo
Y si, lo de liar en la cocina es algo tuyo como ya pudimos ver en otras ocasiones-un cheff no tanto perfecto

Unknown dijo...

Vaya panda de criticones todos. xD.

Ocultos tras el anonimato de internet es muy fácil. Anónimo, te reto. Haz tu un tiramisú y házmelo llegar.