Cuando acabó el capítulo que estaba viendo y mientras esperaba a que se acabase de bajar el siguiente (Descargas legales eh ministra) fui a prepararme la cena. La primera opción fue la de hacerme una tortillita, pero me di cuenta de que un paquete de bacon caducaba ese mismo día.
Así que siendo fiel a mis principios y recordando entradas anteriores, volví a guardar el huevo y opté por una pizza de Bacon y BBQ.
Hasta aquí todo normal. Precalenté el horno, preparé la pizza y la metí. 8 minutos después tenía lista mi pizza, así que sólo tenía que ponerla en un plato y usar el cortapizzas. . . Pues bien, el problema llegó a la hora de ponerla en el plato.
Saqué toda la bandeja del horno y la apoyé en la encimera, levanté un poquito el canto de la pizza y empecé a introducir poquito a poco el plato para evitar que se volcase, total, que cuando tenía 3/4 de pizza en el plato, me quemé el dedo y por un acto reflejo levanté la mano haciendo que la pizza hiciese un divertido giro de 180º vertiendo todo el queso y el bacon sobre la encimera.

Aquí podéis ver el estropicio.
Como habéis podido ver en la foto, la ley de Murphy es aplicable no sólo a las totadas y a la mermelada, sino también a las pizzas, Si una Pizza se puede caer, caerá siempre del lado del queso.
¿¿¿Estas putadas que me pasan os divierten más que los cupones descuento o las tartas de queso eh. . .?? Sois unos cabrones, que lo sepáis, pero con cariño.
Pues bien, después de recomponerla como buenamente pude, me tocó comérmela, y no tenía un aspecto tan repugnante, Estaba incluso mejor que las del kebab de al lado de la oficina.

Aquí podemos ver la pizza remontada.






Y es que me sobraba la Edición que tenéis aquí arriba, y eso tenía que solucionarlo de alguna manera. Sólo se me ocurría una cosa, ir a El Corte Inglés y poner ojitos de pena a ver como podríamos solucionarlo, ya que no quería perder el fabuloso descuento del 40%, y tampoco sabía que otra película podría comprar. . .
Cuando le expliqué la historia a la chica de Hipercor, muy amablemente me dijo que no había ningún problema, y que eligiese otra película y ya está, así que rebuscando un poquito vi dos opciones interesantes. O me quedaba con Tom Hanks intentando salvar al Soldado Ryan u optaba por el divertido Mel Brooks en la piel del Doctor Fronkonstin. Así que aunque Salvar al soldado Ryan es un peliculón, esta vez opté por algo más cómico.