Cupones Descuento.

En tiempos de crisis hay que agudizar el ingenio para permanecer a flote donde otros sucumben. Leonardo Dicaprio sabe bien a que me refiero. El se hundió. La última vez que fui a casa de mis padres, mi madre me dio unos descuentos para unas barritas de cereales Kellogs, en las que te descontaban 2 €. Ya tenía en casa un cheque de Decathlon por valor de 6 € y otro de Hipercor que me dieron de unos 7 si no recuerdo mal.

Pues bien, ayer, para completar los descuentos llegaron a casa las paginas amarillas. Tiempo atrás, cuando estas molaban, los descuentos que había eran de Burger King o MCDonalds, ya sabes, hamburguesas gratis, o 2X1, o menús rebajados. Hoy, los descuentos que traen son, hablando pronto y mal, Una Puta Mierda.

Pero así evitaré caer en la tentación de usar descuentos y alimentarme de comida insana.

La única utilidad que le quedaba a las paginas amarillas hoy en día era la de los cupones descuento, y ahora ya ni eso.