Las Pelotas de mis Vecinos.

No Escudeitor, aunque por el título de la entrada hayas pensado en vecinos nudistas/naturistas siempre en bolas por la comunidad, o que algún vecino ha salido al balcón como Dios le trajo al mundo, tengo que decirte que nada más lejos de la realidad, siento desilusionarte. Tampoco voy a hablar de los hijos diabólicos de mis vecinos, aun no han aparcado sus bicis y se han pasado a jugar con la pelota día y noche. . . Antes de desvelar el misterio vamos a viajar con la mente atrás en el tiempo.

Cuando hace ya unos añitos compré el piso, no practicaba ningún deporte de raqueta, bueno, había tonteado algo de pequeño con el tenis o con el frontón, pero no era nada serio, vamos, fue un rollito de un verano cuando tenia 13 años. Pero las aficiones y los gustos cambian. . .

Por culpa de Al el Viajero, probé el Padel y me gustó, con lo cual, lo que en principio era un tema sin importancia, como es la falta de pista de Padel en el residencial donde uno vive, se convirtió en una de las principales cosas que echo en falta, y más, cuando todos los que habéis estado en casa sabréis que todos los vecinos de los alrededores tienen su pista de Padel . . . Cabrones. Aunque bueno, no hay mal que por bien no venga. El tener vecinos con pista de Padel y tu no, implica que las pelotas perdidas solo van en una dirección, hacia tu territorio. El otro día, y no es la primera vez que pasa, al entrar al garaje con el coche me encontré esto, una Genuina Wilson Padel.

Genuina Wilson Padel.

Algún vecino torpón debió golpear demasiado fuerte la bola, y esta saltó la valla, cayendo en nuestros dominios. Si hubiese estado yo allí al caer, la habría devuelto por encima de la valla, ya que a nadie le gusta perder una Wilson Padel, pero como cuando la encontré no había nadie. . . la subí a casa para cuidarla y dejarla junto al resto de mis Wilson Padel.

Ahora si quiero jugar a padel tengo dos opciones, o alquilar una pista como se hace normalmente o dejar en casa de los vecinos un cartelito que ponga "Busco amigo en esta finca". Ya veremos que nos deparará el futuro.